Tragedia de Once

¿Quiénes son los responsables? ¿Quiénes sufren las consecuencias?

Las organizaciones que conformamos la COMPA (Coordinadora de Organizaciones y Movimientos Populares de Argentina) manifestamos un profundo dolor por los hechos suscitados en el accidente de la mañana de hoy en la estación de once del ferrocarril Sarmiento donde murieron 49 personas y 600 resultaron heridas, muchas de ellas de gravedad. 

Expresamos todo nuestro pesar por los fallecidos, heridos y afectados, y toda nuestra solidaridad con sus familias. Al mismo tiempo sentimos rabia e impotencia ya que entendemos que estas eran muertes evitables, siendo una vez más nuestro pueblo víctima de una tragedia anunciada, consecuencia de la desidia, la irresponsabilidad y las lógicas rapaces del poder económico y político. A diario sufrimos los desastres del pésimo servicio, y los accidentes son cada vez más frecuentes. El choque de trenes en febrero del año pasado en San Miguel y la tragedia de Flores, donde 11 personas murieron son una muestra de ello. La infraestructura es deficitaria y obsoleta, la insuficiencia en la frecuencia provoca saturación por la falta de trenes configurando una situación de insalubridad y precarización laboral que promueven los errores humanos o los defectos técnicos.

La empresa Trenes de Buenos Aires (TBA) encabezada por los Cirigliano y sus socios junto con el gobierno nacional son los máximos corresponsables de lo ocurrido hoy. Ambos no han hecho más que profundizar en los últimos años la política de desmantelamiento de la red ferroviaria y su deterioro iniciada con las privatizaciones en los 90. La empresa es responsable en primera instancia por la falta de inversión y la mala gestión, llevándose cuantiosas ganancias a costa del perjuicio que nos propinan a diario. El gobierno por su parte no sólo que permite el accionar de TBA sino que subsidia el servicio con sumas astronómicas, sin ejercer los controles necesarios ni tomar medida alguna ante el desastroso funcionamiento de los trenes, manteniendo un sistema de transporte deficiente, oneroso y contaminante que privilegia la utilización y la proliferación de los automotores. 

Vale mencionar también la complicidad de la burocracia sindical que avala y cogestiona este sistema perverso, asumiendo además la tarea de reprimir cualquier intento de respuesta de los trabajadores que han denunciado esta situación.

Desde la COMPA exigimos el esclarecimiento de estos hechos junto con la adecuada asistencia a las víctimas. Allí estaremos acompañando con nuestras fuerzas el pedido de justicia ante el gobierno nacional y la empresa. A su vez reclamamos al gobierno nacional que revise esta política nefasta quitando inmediatamente la concesión a TBA e iniciando la nacionalización de los ferrocarriles con una política de restablecimiento de la red ferroviaria, con una fuerte inversión que permita brindar un servicio seguro, barato y adecuado.

Toda nuestra solidaridad con las víctimas.

Inmediato esclarecimiento de lo sucedido en la tragedia!

Rescisión ya del contrato a TBA!

Nacionalización de los ferrocarriles!